jueves, 10 de diciembre de 2015



La dinámica de aprobación del Presupuesto 2016: Cali y el Valle del Cauca

Durante el periodo octubre-noviembre el Concejo de Cali y la Asamblea del Valle del Cauca aprobaron los presupuestos municipal y departamental del 2016 respectivamente. Paso a comparar algunos aspectos del trabajo en comisiones de ambas corporaciones, dos son los que más llaman la atención: la calidad de los debates y el comportamiento de concejales y diputados durante las sesiones.

En la Comisión de Presupuesto del Concejo se advirtió cierta profundidad en los debates. En primer lugar, por la argumentación de los Departamentos Administrativos de Hacienda y Planeación, entidades que participaron y estuvieron presentes en todas y cada una de las sesiones; en segundo lugar, porque hubo concejales juiciosos que mostraron su dedicación y estudio tanto que sus intervenciones y preguntas fueron coherentes con el contenido de las presentaciones de Hacienda y Planeación. En tercer lugar, el Concejo ofreció un espacio de más de dos días para la participación ciudadana. Este hecho contribuyó  a enriquecer el debate y a modificar ciertos rubros del presupuesto.

En contraste con lo anterior,  hubo situaciones que enturbiaron la dinámica positiva. En más de tres ocasiones, la Comisión de Presupuesto tuvo que levantarse por falta de quórum; además, fue constante la inasistencia e intermitencia del Presidente de la comisión, Albeiro Echeverri.

El debate en comisión  de la Asamblea Departamental, para estudiar el presupuesto anual del Departamento, se hace conjuntamente entre las comisiones  del Plan de Desarrollo Económico y Social, y de Asuntos Económicos y Fiscales. Esta función se realizó, en esta ocasión, de manera lenta y en ocasiones tediosa. Primero, porque si bien la sustentación del presupuesto dada por el Secretario de Hacienda, Juan Manuel Obregón, estuvo bien argumentada, las intervenciones y preguntas de los diputados muchas veces fueron incoherentes, pues no estaban relacionadas directamente con lo expuesto por el funcionario, o repetitivas, cuando la atención de algunos de ellos era nula. Tampoco se observó la Ley Estatutaria 1757 de participación ciudadana en cuanto a convocar a la ciudadanía a intervenir sobre el proyecto de Ordenanza que establece el Presupuesto del 2016 (Título VI DE la participación SOCIAL ANTE LAS CORPORACIONES PÚBLICAS).

Sin embargo, a diferencia de los concejales, ninguna de las sesiones de comisión que tuvo como propósito aprobar el Presupuesto, presentó dificultades para la conformación del quórum deliberatorio, hecho que permitió que se llevaran a cabo todas las sesiones citadas.


Javier E. Restrepo
Practicante – Observatorio Cali Visible
Pontificia Universidad Javeriana Cali

martes, 1 de diciembre de 2015

Maurice Armitage y la necesidad de recuperar a Cali

Javier E. Restrepo
Practicante – Carrera de Ciencia Política Javeriana - Cali

Quizás el título de este artículo supone la idea de que Cali está perdida o que la administración Guerrero fue un caos. No pretendo afirmar ello; hay que reconocerle a la actual administración el fortalecimiento de las finanzas del municipio. “La necesidad de recuperar a Cali” significa contar con recursos para superar dos grandes retos: la seguridad y la movilidad.

La inseguridad, un tema en que todos estamos de acuerdo, representa para Cali un alto número de celulares robados, fleteos diarios, alta tasa de homicidios, aunque las cifras de Cali Cómo Vamos indican que entre 2013 y 2014  se redujo en aproximadamente 20 % (de 82 x 100.000 hab pasó a 66). Sin embargo, este dato supera  el promedio nacional que es de 27 x 100.000 hab.  Otra preocupación al respecto de la seguridad tiene que ver con los desmovilizados, en el evento en que Colombia firme un acuerdo para la finalización del conflicto con las FARC. Cuando se dan este tipo de desmovilizaciones se presentan grandes desafíos para las grandes ciudades, sobre todo cuando no cuentan con programas y proyectos de resocialización e inserción a la vida civil (léase el caso de Honduras o Guatemala, cuando el conflicto que era rural se trasladó a las ciudades con los MARAS).


 El segundo tema que más me inquieta, sobre todo por lo que se escuchó en casi todos los debates, es el de la movilidad, pues en los diferentes debates el Dr. Armitage sugirió la inclusión de medios de transporte alternativos –gualas y demás- al MIO. Quizás olvidó el recién electo Alcalde de Cali que más de un millón de vehículos transitan por una ciudad, cuya infraestructura vial no tiene la capacidad de aguantar tal cifra.